Cesta
0
0,00 ARS
Repetí conmigo:
"No me cuesta, estoy aprendiendo a hacerlo mientras lo
sigo intentando"
"No me cuesta: es nuevo y estoy conociendo cómo funciona"
"No es que no sé, en realidad recién me animé a dar el paso a probarlo y
lo estoy experimentando"
"No me cuesta, está sucediendo y así me sale"
Hoy es el día de quitar "me cuesta" y proponernos un "sigo
probando". Estamos probando formas nuevas de comunicarnos, de hacer
acuerdos, de trabajar y de ser.
Cuando decimos que algo nos cuesta, no cambia en lo más mínimo lo que está
pasando, sino que le agrega peso.
"Si me cuesta, es porque mi cabeza dice que tengo que hacerlo de una forma
a la que aun no puedo llegar".
Alira