Acerca del amor y el encierro

04.12.2017

Y después de tantas idas y vueltas entendiste que no era para vos, que nunca te iba a pertenecer, y que si pretendías encerrarle con tus condiciones, si le encerrabas y aceptaba que le encierres, te ibas a quedar con la inmensa duda de qué era lo que iba a elegir si dejabas de ver como una opción que se quede SÍ o SÍ.
Te entristeciste cada vez que se fue hasta que entendiste que si se iba era porque antes había elegido quedarse un rato a encontrarte (encontrarse).

Si le atabas nunca te ibas a enterar acerca de eso que tenías miedo de ver, escuchar o simplemente sentir.

Es que no existe ningún abandono, si nunca se fue, si nunca "le dejaste" ni "te dejó", solo dejaron de encontrarse. No existe porque sólo elegiste seguir tu camino, seguir tu camino "libre". Y si hay libertad, no hay encierro, y nadie necesita "escaparse". De eso se trata romper todos los esquemas.

No hay nada que soltar, ni nada que dejar ir, solo dejar de imaginar que otro ser te pertenece y te tiene que obedecer, o rendir cuentas o tantas cosas más. Pensar más o menos en cómo retener a otro, genera las condiciones adecuadas para ser más infelices, y claramente, en lo más mínimo aporta a que la situación actual se transforme a una más feliz.

¿Sabías que te volvés más lindx cuando sos libre? TE QUEDA PRECIOSO.

El amor aparece cuando elegís aceptar un encuentro sin forzar, no existen las obligaciones ni los compromisos.
Nos vemos la próxima, sin encierros, libres, locxs, lindxs, pero recordá que solamente si elegimos volver a cruzarnos. ¿Te animás?

Ps. Camila Verónica Pérez